1 Ennustus meren viereisestä erämaasta. Niinkuin myrskytuulet kiitävät Etelämaassa, niin tulee se erämaasta, peloittavasta maasta.

3 Sentähden minun lanteeni ovat täynnä vavistusta, minut valtaavat tuskat, niinkuin synnyttäjän tuskat; minua huimaa, niin etten kuule, kauhistuttaa, niin etten näe.

4 Minun sydämeni värisee, kauhu peljästyttää minut. Ikävöimäni iltahämärän se muuttaa minulle vavistukseksi.

5 Pöytä katetaan, matto levitetään, syödään, juodaan. Nouskaa, te ruhtinaat, voidelkaa kilvet.

10 Maahan puitu kansani, puimatantereella poljettuni! Mitä olen kuullut Herralta Sebaotilta, Israelin Jumalalta, sen minä teille ilmoitan.

13 Ennustus Arabiaa vastaan. Yöpykää Arabian viidakoissa, dedanilaiset matkueet.

14 Menkää vastaan, viekää vettä janoaville. Teeman maan asukkaat ottavat pakolaiset vastaan, leipää tariten.

15 Sillä he ovat miekkoja paossa, paljastettua miekkaa, jännitettyä jousta ja sodan tuimuutta paossa.

16 Sillä näin on Herra minulle sanonut: Vielä vuosi-sellainen kuin on palkkalaisen vuosi-niin kaikki Keedarin kunnia on kadonnut,

17 ja Keedarin urhojen jousiluvun jäännös on oleva vähäinen. Sillä Herra, Israelin Jumala, on puhunut.

1 CARGA del desierto de la mar. así vienen de la tierra horrenda.

2 Visión dura me ha sido mostrada. El prevaricador prevarica, y el destructor destruye. Sube, Persa; cerca, Medo. Todo su gemido hice cesar.

3 Por tanto mis lomos se han llenado de dolor; angustias se apoderaron de mí, como angustias de mujer de parto: agobiéme oyendo, y al ver heme espantado.

4 Pasmóse mi corazón, el horror me ha intimidado; la noche de mi deseo se me tornó en espanto.

5 Pon la mesa, mira del atalaya, come, bebe: levantaos, príncipes, ungid el escudo.

6 Porque el Señor me dijo así: Ve, pon centinela que haga saber lo que viere.

7 Y vió un carro de un par de caballeros, un carro de asno, y un carro de camello. Luego miró muy más atentamente.

8 Y gritó como un león: Señor, sobre la atalaya estoy yo continuamente de día, y las noches enteras sobre mi guarda:

9 Y he aquí este carro de hombres viene, un par de caballeros. Después habló, y dijo: Cayó, cayó Babilonia; y todos los ídolos de sus dioses quebrantó en tierra.

10 Trilla mía, y paja de mi era: os he dicho lo que oí de Jehová de los ejércitos, Dios de Israel.

11 Carga de Duma. Danme voces de Seir: Guarda, ¿qué de la noche? Guarda, ¿qué de la noche?

12 El guarda respondió: La mañana viene, y después la noche: si preguntareis, preguntad; volved, venid.

13 Carga sobre Arabia. En el monte tendréis la noche en Arabia, oh caminantes de Dedanim.

14 Salid á encontrar al sediento; llevadle aguas, moradores de tierra de Tema, socorred con su pan al que huye.

15 Porque de la presencia de las espadas huyen, de la presencia de la espada desnuda, de la presencia del arco entesado, de la presencia del peso de la batalla.

16 Porque así me ha dicho Jehová: De aquí á un año, semejante á años de mozo de soldada, toda la gloria de Cedar será desecha;

17 Y las reliquias del número de los valientes flecheros, hijos de Cedar, serán apocadas: porque Jehová Dios de Israel lo ha dicho.