30 Entonces el ángel le dice: María, no temas, porque has hallado gracia cerca de Dios.

31 Y he aquí, concebirás en tu vientre, y darás a luz un hijo, y llamarás su nombre Jesús.

32 Este será grande, y será llamado Hijo del Altísimo; y le dará el Señor Dios el trono de David su padre;

33 y reinará en la Casa de Jacob por siempre; y de su Reino no habrá fin.