1 Juudan kuninkaan Jojakimin, Josian pojan, hallitusajan alussa tuli Jeremialle tämä Herran sana:

3 Lähetä niitä sitten Edomin, Moabin, ammonilaisten, Tyroksen ja Sidonin kuninkaille niiden lähettiläiden mukana, jotka ovat tulleet Jerusalemiin Juudan kuninkaan Sidkian luo.

5 Suurella voimallani ja väkevällä kädelläni minä olen luonut sekä maan että ihmiset ja eläimet, jotka maan päällä ovat. Minulla on valta antaa ne kenelle hyväksi näen.

6 Nyt minä annan teidän maanne palvelijalleni Nebukadnessarille, Babylonian kuninkaalle. Vieläpä villieläimet minä panen häntä palvelemaan.

7 Kaikki kansat palvelevat häntä, hänen poikaansa ja pojanpoikaansa, kunnes hänenkin maalleen tulee aika joutua muiden kansojen ja mahtavien kuninkaiden palvelijaksi.

9 Älkää kuunnelko profeettojanne, älkää tietäjiä, unennäkijöitä, ennustajia älkääkä noitianne, jotka sanovat: 'Ette te joudu palvelemaan Babylonian kuningasta.'

10 He puhuvat perättömiä! Jos uskotte heitä, joudutte kauas maastanne -- minä karkotan teidät, ja te tuhoudutte.

11 Mutta sen kansan, joka taivuttaa niskansa Babylonian kuninkaan ikeen alle ja palvelee häntä, minä annan jäädä omille asuinsijoilleen. Siellä se saa asua ja viljellä maataan, sanoo Herra.

13 Miksi sinä ja kansasi kuolisitte miekkaan, nälkään ja ruttoon? Tällaisella lopulla Herra uhkaa jokaista kansaa, joka ei suostu palvelemaan Babylonian kuningasta.

14 Älkää kuunnelko niitä profeettoja, jotka sanovat: 'Ette te joudu palvelemaan Babylonian kuningasta.' He puhuvat perättömiä!

15 Herra sanoo: 'Minä en ole heitä lähettänyt. He valehtelevat, kun sanovat puhuvansa minun nimissäni. Jos uskotte heitä, minä karkotan teidät, ja te tuhoudutte -- te itse ja nuo profeetat, jotka teille puhuvat.'

18 Jos he todella olisivat profeettoja, jotka ovat saaneet sanan Herralta, he rukoilisivat Herraa Sebaotia, ettei hän sallisi niidenkin kallisarvoisten esineiden joutua Babyloniaan, jotka vielä ovat jäljellä Herran temppelissä, Juudan kuninkaan palatsissa ja muualla Jerusalemissa.

19 Ovathan tähän kaupunkiin jääneet vielä temppelin pylväät, sen vesiallas, työntöpöydät ja monet muut esineet.

20 Niitä Babylonian kuningas Nebukadnessar ei ottanut mukaansa viedessään Juudan kuninkaan Jekonjan, Jojakimin pojan, sekä Juudan ja Jerusalemin ylimykset vankeina Babyloniaan.

1 EN el principio del reinado de Joacim hijo de Josías, rey de Judá, fué de Jehová esta palabra á Jeremías, diciendo:

2 Jehová me ha dicho así: Hazte coyundas y yugos, y ponlos sobre tu cuello;

3 Y los enviarás al rey de Edom, y al rey de Moab, y al rey de los hijos de Ammón, y al rey de Tiro, y al rey de Sidón, por mano de los embajadores que vienen á Jerusalem á Sedechîas, rey de Judá.

4 Y les mandarás que digan á sus señores: Así ha dicho Jehová de los ejércitos, Dios de Israel: Así habéis de decir á vuestros señores:

5 Yo hice la tierra, el hombre y las bestias que están sobre la haz de la tierra, con mi grande potencia y con mi brazo extendido, y díla á quien me plugo.

6 Y ahora yo he dado todas estas tierras en mano de Nabucodonosor rey de Babilonia, mi siervo, y aun las bestias del campo le he dado para que le sirvan.

7 Y todas las gentes le servirán á él, y á su hijo, y al hijo de su hijo, hasta que venga también el tiempo de su misma tierra; y le servirán muchas gentes y reyes grandes.

8 Y será, que la gente y el reino que no sirviere á Nabucodonosor rey de Babilonia, y que no pusiere su cuello debajo del yugo del rey de Babilonia, con espada y con hambre y con pestilencia visitaré á la tal gente, dice Jehová, hasta que los acabe yo por su mano.

9 Y vosotros no prestéis oído á vuestros profetas, ni á vuestros adivinos, ni á vuestros sueños, ni á vuestros agoreros, ni á vuestros encantadores, que os hablan diciendo: No serviréis al rey de Babilonia.

10 Porque ellos os profetizan mentira, para haceros alejar de vuestra tierra, y para que yo os arroje y perezcáis.

11 Mas la gente que sometiere su cuello al yugo del rey de Babilonia, y le sirviere, haréla dejar en su tierra, dice Jehová, y labrarála, y morará en ella.

12 Y hablé también á Sedechîas rey de Judá conforme á todas estas palabras, diciendo: Someted vuestros cuellos al yugo del rey de Babilonia, y servid á él y á su pueblo, y vivid.

13 ¿Por qué moriréis, tú y tu pueblo, á cuchillo, de hambre, y pestilencia, según ha dicho Jehová á la gente que no sirviere al rey de Babilonia?

14 No oigáis las palabras de los profetas que os hablan, diciendo: No serviréis al rey de Babilonia; porque os profetizan mentira.

15 Porque yo no los envié, dice Jehová, y ellos profetizan falsamente en mi nombre, para que yo os arroje, y perezcáis, vosotros y los profetas que os profetizan.

16 También á los sacerdotes y á todo este pueblo hablé, diciendo: Así ha dicho Jehová: No oigáis las palabras de vuestros profetas que os profetizan diciendo: He aquí que los vasos de la casa de Jehová volverán de Babilonia ahora presto. Porque os profetizan mentira.

17 No los oigáis; servid al rey de Babilonia, y vivid: ¿por qué ha de ser desierta esta ciudad?

18 Y si ellos son profetas, y si es con ellos palabra de Jehová, oren ahora á Jehová de los ejércitos, que los vasos que han quedado en la casa de Jehová y en la casa del rey de Judá y en Jerusalem, no vayan á Babilonia.

19 Porque así ha dicho Jehová de los ejércitos de aquellas columnas, y del mar, y de las basas, y del resto de los vasos que quedan en esta ciudad,

20 Que no quitó Nabucodonosor rey de Babilonia, cuando trasportó de Jerusalem á Babilonia á Jechônías hijo de Joacim, rey de Judá, y á todos los nobles de Judá y de Jerusalem:

21 Así pues ha dicho Jehová de los ejércitos, Dios de Israel, acerca de los vasos que quedaron en la casa de Jehová, y en la casa del rey de Judá, y en Jerusalem;

22 A Babilonia serán trasportados, y allí estarán hasta el día en que yo los visitaré, dice Jehová; y después los haré subir, y restituirélos á este lugar.