1 Siihen aikaan ei ollut kuningasta Israelissa; ja siihen aikaan daanilaisten sukukunta etsi itsellensä perintöosaa asuttavaksensa, sillä siihen päivään asti se ei ollut saanut perintöosaa Israelin sukukuntien kesken.

7 Niin ne viisi miestä jatkoivat matkaansa ja tulivat Laikseen; ja he näkivät, että sikäläinen kansa asui huoleti siidonilaisten tavoin, rauhassa ja huoletonna; eikä kukaan tehnyt vahinkoa siinä maassa rikkauksia anastamalla. Myöskin olivat he kaukana siidonilaisista eivätkä olleet tekemisissä muitten ihmisten kanssa.

11 Niin lähti sieltä liikkeelle, daanilaisten sukukunnasta, Sorasta ja Estaolista, kuusisataa sota-aseilla varustettua miestä.

13 Sieltä he kulkivat Efraimin vuoristoon ja tulivat Miikan talolle asti.

15 Niin he poikkesivat sinne ja tulivat sen nuoren leeviläisen miehen asunnolle, Miikan taloon, ja tervehtivät häntä.

16 Ja ne kuusisataa sota-aseilla varustettua daanilaista asettuivat portin oven eteen.

17 Ja ne viisi miestä, jotka olivat käyneet vakoilemassa maata, nousivat taloon, menivät sisään ja ottivat veistetyn jumalankuvan ja kasukan ja kotijumalat ja valetun jumalankuvan, mutta pappi ja ne kuusisataa sota-aseilla varustettua miestä seisoivat portin oven edessä.

20 Silloin pappi tuli hyville mielin, ja hän otti kasukan ja kotijumalat ja veistetyn jumalankuvan ja meni väen keskeen.

21 Sitten he kääntyivät jatkamaan matkaansa ja panivat vaimot ja lapset sekä karjan ja kuormaston kulkemaan edellänsä.

22 He olivat ehtineet vähän matkaa Miikan talosta, kun Miikan talon lähitalojen miehet kutsuttiin koolle, ja he pääsivät daanilaisten kintereille.

26 Niin daanilaiset jatkoivat matkaansa, ja kun Miika näki, että he olivat häntä voimakkaammat, kääntyi hän ja palasi kotiinsa.

27 Otettuaan siis sen, minkä Miika oli teettänyt, sekä hänen pappinsa, hyökkäsivät he Laiksen rauhassa ja huoletonna elävän kansan kimppuun ja surmasivat heidät miekan terällä ja polttivat kaupungin tulella.

28 Eikä kukaan tullut avuksi, sillä se oli kaukana Siidonista eivätkä he olleet tekemisissä muitten ihmisten kanssa; se oli Beet-Rehobin tasangolla. Daanilaiset rakensivat kaupungin uudestaan ja asettuivat siihen.

29 Ja he antoivat kaupungille nimen Daan, isänsä Daanin nimen mukaan, hänen, joka oli Israelille syntynyt; mutta ennen oli kaupungin nimi ollut Lais.

30 Sitten daanilaiset pystyttivät itsellensä sen veistetyn jumalankuvan; ja Joonatan, Manassen pojan Geersomin poika, ja hänen poikansa olivat daanilaisten sukukunnan pappeina, kunnes maan väestö vietiin pakkosiirtolaisuuteen.

31 He pystyttivät itsellensä sen veistetyn jumalankuvan, jonka Miika oli teettänyt, ja se oli siinä koko ajan, minkä Jumalan huone oli Siilossa.

1 EN aquellos días no había rey en Israel. Y en aquellos días la tribu de Dan buscaba posesión para sí donde morase, porque hasta entonces no le había caído suerte entre las tribus de Israel por heredad.

2 Y los hijos de Dan enviaron de su tribu cinco hombres de sus términos, hombres valientes, de Sora y Esthaol, para que reconociesen y explorasen bien la tierra; y dijéronles: Id y reconoced la tierra. Estos vinieron al monte de Ephraim, hasta la casa de Michâs, y allí posaron.

3 Y como estaban cerca de la casa de Michâs, reconocieron la voz del joven Levita; y llegándose allá, dijéronle: ¿Quién te ha traído por acá? ¿y qué haces aquí? ¿y qué tienes tú por aquí?

4 Y él les respondió: De esta y de esta manera ha hecho conmigo Michâs, y me ha tomado para que sea su sacerdote.

5 Y ellos le dijeron: Pregunta pues ahora á Dios, para que sepamos si ha de prosperar nuestro viaje que hacemos.

6 Y el sacerdote les respondió: Id en paz, que vuestro viaje que hacéis es delante de Jehová.

7 Entonces aquellos cinco hombres se partieron, y vinieron á Lais: y vieron que el pueblo que habitaba en ella estaba seguro, ocioso y confiado, conforme á la costumbre de los de Sidón; no había nadie en aquella región que los perturbase en cosa alguna para poseer aquel estado; demás de esto, estaban lejos de los Sidonios, y no tenían negocios con nadie.

8 Volviendo pues ellos á sus hermanos en Sora y Esthaol, sus hermanos les dijeron: ¿Qué hay? y ellos respondieron:

9 Levantaos, subamos contra ellos; porque nosotros hemos explorado la región, y hemos visto que es muy buena: ¿y vosotros os estáis quedos? no seáis perezosos en poneros en marcha para ir á poseer la tierra.

10 Cuando allá llegareis, vendréis á una gente segura, y á una tierra de ancho asiento; pues que Dios la ha entregado en vuestras manos; lugar donde no hay falta de cosa que sea en la tierra.

11 Y partiendo los de Dan de allí, de Sora y de Esthaol, seiscientos hombres armados de armas de guerra,

12 Fueron y asentaron campo en Chîriath-jearim, en Judá; de donde aquel lugar fué llamado el campo de Dan, hasta hoy: está detrás de Chîriath-jearim.

13 Y pasando de allí al monte de Ephraim, vinieron hasta la casa de Michâs.

14 Entonces aquellos cinco hombres que habían ido á reconocer la tierra de Lais, dijeron á sus hermanos: ¿No sabéis como en estas casas hay ephod y teraphim, é imagen de talla y de fundición? Mirad pues lo que habéis de hacer.

15 Y llegándose allá, vinieron á la casa del joven Levita en casa de Michâs, y preguntáronle cómo estaba.

16 Y los seiscientos hombres, que eran de los hijos de Dan, estaban armados de sus armas de guerra á la entrada de la puerta.

17 Y subiendo los cinco hombres que habían ido á reconocer la tierra, entraron allá, y tomaron la imagen de talla, y el ephod, y el teraphim, y la imagen de fundición, mientras estaba el sacerdote á la entrada de la puerta con los seiscientos hombres armados de armas de guerra.

18 Entrando pues aquellos en la casa de Michâs, tomaron la imagen de talla, el ephod, y el teraphim, y la imagen de fundición. Y el sacerdote les dijo: ¿Qué hacéis vosotros?

19 Y ellos le respondieron: Calla, pon la mano sobre tu boca, y vente con nosotros, para que seas nuestro padre y sacerdote. ¿Es mejor que seas tú sacerdote en casa de un hombre solo, que de una tribu y familia de Israel?

20 Y alegróse el corazón del sacerdote; el cual tomando el ephod y el teraphim, y la imagen, vínose entre la gente.

21 Y ellos tornaron y fuéronse; y pusieron los niños, y el ganado y el bagaje, delante de sí.

22 Y cuando ya se habían alejado de la casa de Michâs, los hombres que habitaban en las casas cercanas á la casa de Michâs, se juntaron, y siguieron á los hijos de Dan.

23 Y dando voces á los de Dan, éstos volvieron sus rostros, y dijeron á Michâs: ¿Qué tienes que has juntado gente?

24 Y él respondió: Mis dioses que yo hice, que lleváis juntamente con el sacerdote, y os vais: ¿qué más me queda? ¿y á qué propósito me decís: Qué tienes?

25 Y los hijos de Dan le dijeron: No des voces tras nosotros, no sea que los de ánimo colérico os acometan, y pierdas también tu vida, y la vida de los tuyos.

26 Y yéndose los hijos de Dan su camino, y viendo Michâs que eran más fuertes que él, volvióse y regresó á su casa.

27 Y ellos llevando las cosas que había hecho Michâs, juntamente con el sacerdote que tenía, llegaron á Lais, al pueblo reposado y seguro; y metiéronlos á cuchillo, y abrasaron la ciudad con fuego.

28 Y no hubo quien los defendiese, porque estaban lejos de Sidón, y no tenían comercio con nadie. Y la ciudad estaba en el valle que hay en Beth-rehob. Luego reedificaron la ciudad, y habitaron en ella.

29 Y llamaron el nombre de aquella ciudad Dan, conforme al nombre de Dan su padre, hijo de Israel, bien que antes se llamaba la ciudad Lais.

30 Y los hijos de Dan se levantaron imagen de talla; y Jonathán, hijo de Gersón, hijo de Manasés, él y sus hijos fueron sacerdotes en la tribu de Dan, hasta el día de la transmigración de la tierra.

31 Y levantáronse la imagen de Michâs, la cual él había hecho, todo el tiempo que la casa de Dios estuvo en Silo.